¡Hola, familias!
Después de un largo día de viaje, por fin hemos llegado a nuestro tan ansiado destino: Cambridge. Como sabéis, esta mañana nos encontramos muy temprano en el aeropuerto de Sevilla para coger el avión a Gatwick. El vuelo transcurrió sin sobresaltos, y, aunque algunos estábamos muy nerviosos, se nos pasó volando ;).
Ya en el aeropuerto de Londres nos hicimos camino hasta el autobús que nos llevaría hasta el último punto del trayecto, Cambridge. Jim, nuestro conductor, fue fantástico y nos ayudó a tener un recorrido la mar de tranquilo.
Pese a estar muy cansados, estábamos súper contentos y emocionados por llegar y conocer la escuela (bueno, y por comer, todo sea dicho 😉 ). Cuando nos quisimos dar cuenta, ya habíamos llegado. Después de comer y hacer uso del futbolín y de la playstation que tenemos en la cantina (donde los chicos jugaron un derbi sevillano a más de 2000 quilómetros de casa), dimos un paseo hasta la Iglesia de St. Mery, disfrutamos de la música en directo con la que nos amenizó un cantante local y emprendimos camino por las angostas escaleras (¡de 123 escalones!) que nos llevarían hasta lo más alto de la torre. Allí, parados sobre más de 800 años de historia teníamos una vista panorámica de todo Cambridge, fue precioso e increíble. Por supuesto, también saqueamos la tienda de regalos 🙂 .
Luego volvimos a la escuela. Tocaba lo mejor, ¡ir a casa y conocer a nuestras familias anfitrionas! Todas parecen increíbles, y sabemos que van a ser una parte clave de que esta experiencia sea fantástica. El resto de la noche consistirá en instalarnos y descansar para mañana, y así estar frescos para el primer día de clases y para seguir conociendo la ciudad.
Así que sin más dilación, os dejo algunas fotos que hemos sacado hoy. Nos leemos mañana 🙂 .
– Nerea
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