Queridas familias,
Hoy ha sido un día intenso, emocional y maravilloso pues la temperatura y el clima han favorecido muchas de las actividades programadas. Después de empezar el día con un desayuno energizante, como de costumbre, hemos quedado todos en Atlas School (la escuela donde se realizan las clases) para dirigirnos junto a nuestra fantástica guía local al museo de Dublinia.
Antes de empezar la visita, hemos podido admirar por el camino, la belleza de uno de los monumentos más icónicos de Dublín, la catedral de Saint Patrick, una verdadera construcción gótica (aunque también con detalles románicos) que esconde muchos de los grandes misterios de la ciudad y de algunos personajes célebres como Jonathan Swift (autor de Los viajes de Gulliver)…
Cuando hemos entrado en el museo, nos hemos dado cuenta de que se compone de varios niveles, explorando las distintas etapas que sufrió Dublín durante la ocupación por parte de ingleses, celtas y vikingos, además de su historia medieval. A través de un recorrido totalmente interactivo y lleno de mecanismos, exposiciones y puzzles, los estudiantes han aprendido sobre la realidad del pasado de esta ciudad, incluso teniendo momentos y contrapuntos más cómicos, que han hecho de la visita una experiencia extraordinaria.
Seguidamente, hemos almorzado y nos hemos dirigido a las clases en la escuela, dado que hoy los estudiantes debían ultimar los detalles de su proyecto lingüístico final para presentarlo mañana delante del resto de compañeros. Pronto os contaré más detalles al respecto.
Por la tarde, hemos disfrutado de una actividad única, la búsqueda del tesoro, donde los estudiantes debían completar un dosier con pruebas de lo más alocadas en un tiempo determinado para alzarse con la victoria y recibir un premio sorpresa… Algunas de las pruebas incluían conseguir objetos determinados de Dublín (sin usar ni un céntimo de dinero) como posavasos de la marca Guiness o publicidad en irlandés, también debían contestar preguntas de la cultura irlandesa y del parque de Stephen’s Green, sin poder usar internet en ningún momento, solo su observación e ingenio. Ha sido realmente una tarde competitiva, pero con mucho compañerismo y ¡muchas risas a la hora de analizar los resultados!
Finalmente, los estudiantes y miembros del staff hemos decidido pasar la noche cenando fuera y disfrutando del ambiente nocturno de Dublín, que seguro ha animado a muchos a bailar, cantar y disfrutar de la cultura irlandesa de los pubs y bares musicales.
Nos acostamos cansados, pero felices de la gran experiencia que estamos viviendo en el extranjero. ¡Con muchas ganas de continuar así!
Un abrazo,
Patrik
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