¡Hola familias!
Espero que hayáis disfrutado de este sábado. Espero que nadie haya sufrido inundaciones por las lluvias de estos días. Hemos visto algún vídeo y nos han dejado locos…
Nosotros empezamos la mañana tempranito para ir a nuestra excursión por The Burren, una zona de montaña rocosa, famosa por su fauna y flora, y los acantilados de Moher, unos de los acantilados más famosos de toda Irlanda. Durante el tour nos acompañó un busero que nos fue contando todos los detalles de la zona y parando en todos los lugares de interés que nos encontrábamos.
Paramos a comer en un pequeño pueblo en medio de la montaña, antes de llegar a los Cliffs. Desgraciadamente, conforme nos acercábamos veíamos que ver los acantilados no iba a ser posible, ya que aunque no llovía la niebla era tan espesa que no se podía ver más allá de unos metros. Y así fue, aunque pudimos atisbar parte de los acantilados en un breve momento que la niebla despejó unu poquito, no pudimos disfrutarlos del todo. Pese a ello vimos el Centro de Conservación y dimos un paseo por las praderas que rodean el área, por donde pudimos ver varios rebaños de vacas pastando tranquilamente o acercándose a la gente por caricias.
Al terminar en los Cliffs visitamos brevemente una última parada y condujimos de vuelta hasta Galway. Una vez de vuelta, el bus ya había hecho mella en nosotros y decidimos retirarnos tempranito a pasar las últimas tarde-noches con nuestras familias de aquí.
Mañana va a ser un día tranquilo y de últimas compras en el que tendremos que empezar a decir adiós a la ciudad. Mañana os cuento cómo ha sido nuestro último día aquí, no sin antes dejaros unas fotos de hoy.
Un abrazo grande,
Mar
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