Canterbury y noche en familia

¡Hola!

¡Hoy ha sido un día fantástico! Para empezar, ha sido el cumpleaños de uno de nuestros compañeros, Agustín, al que aprovecho para felicitar de nuevo. Sus compañeras le tenían preparada una sorpresa preciosa: una banda de felicitación que se han traído desde España. Durante el primer descanso de la mañana, le hemos cantado el cumpleaños feliz en la cantina y se la han dado.

Además, en la hora de la comida nos han puesto la ambrosía de los adolescentes, nuggets y patatas fritas. ¡Causaron sensación! Hasta pensé que se iban a pelear para repetir. Afortunadamente, no lo hicieron 😉 .

Después emprendimos camino a la royal esplanade para subirnos al bus que nos llevaría a Canterbury. ¡Qué bonito es! ¡Parece sacado de un cuento de hadas! Allí, Rodrigo decidió tomar las riendas del tour y, con ayuda de Nikita, nos dio toda la información de los sitios por los que pasábamos. Lo hizo genial, ¡y además en inglés! Es ya todo un profesional del sector.

Al acabar el tour tuvimos un par de horas de tiempo libre, en el que los chicos aprovecharon para explorar la ciudad (y, por supuesto, el McDonalds y el poundland) y acabar de comprar algunos detalles.

Por la noche tuvimos tiempo en familia, donde pudieron hablar más con sus host families, jugaron a juegos de mesa, vieron películas y pasearon. ¡Qué bien lo pasaron!

Mañana será nuestro último día de clases, ya que el viernes tenemos la mañana libre, y estoy segura de que los chicos están muy emocionados. ¡Ya casi se acaba la experiencia! Es una auténtica pena, ojalá durase más.

Os dejo con algunas fotos del día. Nos leemos mañana,

– Nerea