Hello again!!
Ya estamos más que asentados en esta maravillosa ciudad. Después de unos días en los que el tiempo cambiaba de un momento a otro, aunque sin llover demasiado, por fin disfrutamos de los primeros días de sol completos, y por supuesto, calor.
El miércoles, a pesar de que Toronto amaneció cubierta por el humo de los fuegos que están ocurriendo en la región de Quebec, pudimos gozar de una increíble tarde de verano en las islas del Lago Ontario, a las que se llega fácilmente con un ferry que sale del puerto de Toronto.
Allí, el aire estaba mucho mejor, ya que es una zona bastante aireada, y pudimos practicar algo de deporte como voleibol, fútbol, frisbie, jugar a las cartas, o simplemente descansar un poco y tomar el sol. Compartimos este momento también con el resto de los estudiantes de la escuela, que incluyen gente de Brasil, Méjico y Colombia. En nada, también se sumarán estudiantes de Turquía, Francia e Italia. Después de este momento de relax, nos pusimos los chalecos salvavidas y nos aventuramos a recorrer un poquito del lago en canoa. Los chicos que guiaban nuestras barcas nos dieron un pequeño cursillo de seguridad y también, por supuesto, sobre cómo remar. Después, nos montamos en distintas canoas y realizamos un pequeño tour a través del cual conocimos la flora y fauna de la zona, como nenúfares, tortugas, cigüeñas… y el skyline de la ciudad desde una perspectiva increíble. Para finalizar, echamos una carrera entre nosotros, de la cual salimos victoriosos, así que los brasileños tendrán que esperar a otra ocasión.
El jueves, también después de las clases y de comer tranquilamente, pusimos rumbo en metro a la parada de Union. Ahí pudimos cruzar toda la estación, la cual es la más grande de toda la ciudad porque engloba los servicios de tren, metro, tranvía y buses, incluyendo los que tienen como destino otros puntos de Canadá o Estados Unidos.
Desde la estación accedimos directamente a la base de la torre, y de ahí, tras un relativamente corto viaje en ascensor, llegamos al punto más alto de la ciudad: el mirador de la CN Tower. Considerada una de las 7 maravillas del mundo moderno, esta torre fue la estructura más alta construida por el ser humano durante 32 años, hasta que fue superada por el Burj Khalifa. Es uno de los elementos más característicos de Toronto, siendo pieza fundamental de su skyline y convirtiéndose en parte de la cultura canadiense, como por ejemplo siendo portada del disco Views de Drake.
Desde la torre pudimos contemplar la magnitud de la ciudad donde nos encontramos. Para nosotros, que solo nos movemos en metro o a pie por zonas cercanas, Toronto no es una gran ciudad, pero desde lo alto de la torre pudimos comprobar lo inmensa que es, y eso que no pudimos contemplar los 642 kilómetros cuadrados de extensión.
Para finalizar el día pudimos ir de compras a tiendas que no nos quedan muy cerca habitualmente, o a comprar cosas que necesitamos, como detergente para hacer la colada.
Como podéis comprobar no tenemos ni un respiro y estamos a tope, disfrutando un montón y conociendo esta ciudad que nos está encantando.
Este fin de semana también tenemos un horario bastante cargado con el día de la Independencia de Canadá y también el viaje a las cataratas del Niagara. Así que estad atentos que el lunes os contaremos sobre ello. Hasta entonces…
BYE!!
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