¡Hoy es nuestro último día en Galway!
(Aunque mañana, viernes, nos volveremos a despertar en la ciudad irlandesa no pasaremos más que unas pocas horas)
Nos quedaríamos aquí unos cuantos días más, aunque es cierto que alguno ya echa de menos su cama y tiene ganas de volver a ella.
Hoy entramos una última vez a la clase que tenemos asignada en la escuela, nos despedimos de los profes, comimos nuestros últimos packed lunches en la Students Room…Pero al acabar de comer no tuvimos mucho tiempo para ponernos nostálgicos porque teníamos un último día movidito. ¡Y no solo por el viento que hacía!
Primero fuimos caminando hasta el Spanish Arch, del que ya sabíamos un montón de cosas que habíamos aprendido estos días, porque teníamos que pasar por debajo (y aprovechar para sacar foto grupal, of course) para llegar a nuestra siguiente parada: ¡el Galway Museum!
Fue una visita cortita pero nos dio la oportunidad de aprender todavía un poco más sobre la historia de Galway, Claddagh, las islas de Aran… e Irlanda en general.
Cuando salimos del museo estaba lloviendo demasiado como para ir andando a nuestra siguiente parada, así que decidimos coger un autobús que nos llevaría al aquarium de Galway. Por supuesto, todos nos subimos al segundo piso.
Cuando llegamos a Salthill, el pueblecito en el que se encuentra el aquarium, todavía llovía más así que rápido nos refugiamos dentro y pasamos un buen rato sequitos aunque rodeados de agua. Vimos pirañas, pulpos, mantas raya y todo tipo de peces. Aunque una de las cosas que más nos llamó la atención son los dos playmobils gigantes que había a la salida. Os dejo las fotos que sacamos con ellos para inmortalizar el momento.
Más tarde volvimos de Salthill al centro de Galway para un último ratito de compras. ¡No nos queríamos ir de la ciudad! Pero todo lo bueno llega a su fin y está fantástica experiencia ya casi casi ha acabado.
Yo me despido aquí, ha sido un placer compartir esta semana con los chicos: Felix, Mario, Elia, Sara, Aitor, Denis, Alba, Miryam, Dani, Marcos, Lucía, María, Natalia, Bea, Irene…¡Gracias! Y por supuesto gracias a Ruth también. Espero que todos se lleven historias de este viaje que vayan a seguir contando durante años. ¡Y gracias a vosotros también por leerme!
¡Nos vemos prontísimo familias!